En nuestro último
Blog aprendimos que probablemente el cerebro es el culpable de la incomodidad
que la Dra. Sánchez experimenta mientras usted trata de convencerla de que se
cambie al último producto de su compañía, Newazol. La neurociencia nos enseñó
dos cosas acerca del comportamiento de la Dra. Sánchez. Primero, reveló que
contemplar un cambio requiere de algún “levantamiento de pesas” intelectual en
la corteza prefrontal del cerebro. A la Dra. Sánchez—como a todos los
humanos—le gustaría evitar hacer ese doloroso trabajo mental evitando el
cambio, el cual, en este caso, está asociado con el Newazol. Segundo, la
neurociencia reveló que los humanos perciben el cambio como un error o una
amenaza, lo cual activa el centro del miedo en el cerebro—la amígdala—y produce
una respuesta instintiva que lo aleja de la amenaza. Entonces, la Dra. Sánchez
no sólo se ve como si deseara estar en cualquier parte menos parada en frente
de usted, realmente desea estar en cualquier parte menos ahí. Ninguna cantidad
de mentas para mejorar el aliento podrían alterar esa verdad. Ella se está
quedando frente a usted únicamente peleando contra sus instintos animales.
Ahora, gracias a
su recientemente descubierto entendimiento de la neurociencia, probablemente la
Dra. Sánchez parece una causa perdida. ¿Cómo podría entonces usted tener alguna
vez éxito vendiéndole a ella su producto? Usted puede vender Newazol
reconociendo que la Dra. Sánchez, como el resto de nosotros, esta también
construida para acercarse hacia la información que despierte su curiosidad. La
corteza prefrontal del cerebro, la cual identificamos en nuestro último blog
como el área del cerebro de alta energía donde se procesa la nueva información,
es curiosa. Una persona pensando en la corteza prefrontal está preparada para
hacer el tipo de conexiones intelectuales de alto nivel que llevan a la
comprensión. Sin embargo, como se mencionó anteriormente, procesar pensamientos
en la corteza prefrontal requiere una gran cantidad de esfuerzo—el tipo de
esfuerzo que los humanos están programados para evitar. Y, si la corteza
prefrontal percibe el cambio como una amenaza, la amígdala cobrará vida y la
esperanza de inspirar pensamientos intelectuales, de más alto nivel, se habrá perdido.1,
2
Por lo tanto, la
corteza prefrontal puede ser una amiga o enemiga para los representantes que
venden productos asociados con cambio. Afortunadamente, neurocientificos y
sicólogos también han identificado un método para hacer que las personas
procesen el cambio en la corteza prefrontal. Los doctores David Rock y Jeffrey
Schwartz han llamado a este método “cuestionamiento enfocado en la solución”.
1 La técnica comprende hacer preguntas que inspiran a la persona a
conectar los puntos que son problemáticos hasta que estos puntos llevan a una
solución. Las preguntas estimulan la curiosidad, alimentan ideas y llevan a la
persona a darse cuenta por si misma de la necesidad de un cambio. La corteza
prefrontal permanece activa durante la conversación mientras que la amígdala
permanece latente, permitiendo a quien hace las preguntas conectar exitosamente
en un alto nivel intelectual con la persona que está recibiendo las preguntas.
Armado con este
conocimiento, ¿cómo puede usted ajustar el enfoque de su entrevista de ventas
con la Dra. Sánchez? Usted necesita
dejar de empujar a la Dra. Sánchez para que haga un cambio diciéndole todos los
detalles clínicos del medicamento. Usted necesita comenzar a hacer preguntas
acerca de los problemas e implicaciones de su práctica y cual sería para ella
la utilidad o el valor de las soluciones que resuelven sus necesidades. Esto
activará su corteza prefrontal, despertando su curiosidad. Entonces, solo
entonces, usted podrá ayudar para que ella haga la conexión con su producto,
Newazol, como una de esas soluciones. Ella asociará su conversación con ideas
valiosas, no con un cambio amenazador; y usted tendrá muchas mas posibilidades
de hacer la venta.
Vender un
producto, después de todo, es convencer al cliente de que haga un cambio; y el
cambio, nos dice el cerebro, es doloroso. Para hacer una venta usted necesita
adaptar su enfoque de forma que ayude al cliente a evitar la incomodidad que
viene con el cambio. Usted necesita formular preguntas que despierten el
interés y curiosidad del cliente y lo hagan llegar a conclusiones. Y usted
necesita recordar que el cerebro está en el corazón de toda venta exitosa.
Fuentes:
(1) Rock D, Schwartz J. – The neuroscience of leadership. Strategy + Business. Booz & Company. 2006; 43: 1-8
(2) Taylor, S.E.; Eisenberger, N.I.; Saxbe, D.; Leman,
B.J.; Lieberman, M.D. – Neural responses to emotional stimuli are associated
with childhood family stress. Biological Psychiatry. Society of Biological
Psychiatry. 2006; 60: 296-301.
(1) Rock D, Schwartz J. – The neuroscience of leadership. Strategy + Business. Booz & Company. 2006; 43: 1-8
No hay comentarios:
Publicar un comentario